Arroz con Leche Cremoso al Horno con Canela y Azúcar Quemado
¡Prepárate para una experiencia culinaria que eleva un clásico a nuevas alturas! En Quick Recipe, estamos convencidos de que hay pocas cosas tan reconfortantes como un buen arroz con leche. Pero hoy, te invitamos a descubrir nuestra versión horneada: un Arroz con Leche Cremoso al Horno con Canela y Azúcar Quemado que te robará el corazón desde el primer bocado.
Olvídate del constante remover frente al fogón. La magia del horno cocina este postre lentamente, permitiendo que el arroz absorba todos los sabores de la leche, la canela y la cáscara de limón, resultando en una textura increíblemente sedosa y un sabor profundo. Y para culminar, esa capa crujiente y caramelizada de azúcar quemado que aporta el contraste perfecto. ¡Es un postre que luce y sabe espectacular sin apenas esfuerzo!
Perfecto para una tarde fría, una reunión familiar o simplemente para darte un capricho. Sigue nuestros sencillos pasos y sorpréndete con la facilidad con la que puedes crear este manjar digno de los mejores restaurantes, directamente desde tu cocina. ¡Prepárate para el aplauso!
Ingredientes
- 1 taza (200g) de arroz redondo (tipo bomba o arborio)
- 1 litro de leche entera (¡imprescindible para la cremosidad!)
- 150g de azúcar (ajusta a tu gusto)
- 1 rama de canela grande
- La piel de medio limón (solo la parte amarilla, sin la parte blanca)
- Una pizca de sal
- Azúcar moreno o blanco para quemar (al gusto)
- Canela en polvo para decorar
Preparación
Precalienta tu horno a 150°C (300°F). Busca una fuente de horno de tamaño mediano que no sea demasiado plana, idealmente de cerámica o cristal.
En una cacerola grande, vierte la leche entera. Añade el azúcar, la rama de canela, la piel de limón y la pizca de sal. Caliéntalo a fuego medio-bajo, removiendo ocasionalmente hasta que el azúcar se disuelva por completo. No es necesario que hierva, solo que esté caliente y los sabores empiecen a infusionarse.
Una vez que la leche esté caliente y el azúcar disuelto, retira la rama de canela y la piel de limón (aunque algunos prefieren dejarlos). Incorpora el arroz redondo a la cacerola con la leche. Remueve bien para que el arroz no se asiente en el fondo y se distribuya uniformemente.
Vierte toda la mezcla de la cacerola en la fuente de horno preparada. Asegúrate de que el arroz quede bien sumergido en la leche.
Introduce la fuente en el horno precalentado y hornea durante aproximadamente 1 hora y 30 minutos a 2 horas. El tiempo puede variar según tu horno y la profundidad de la fuente. Deberás observar que el arroz esté tierno y haya absorbido la mayor parte de la leche, quedando una textura muy cremosa y ligeramente cuajada en la superficie. Puedes remover suavemente una o dos veces durante la cocción para asegurar una cocción uniforme, pero sin exceso.
Una vez listo, retira el arroz con leche del horno y deja que repose a temperatura ambiente. Es crucial que se enfríe por completo para que adquiera la consistencia perfecta. Puedes incluso refrigerarlo unas horas o toda la noche para un resultado aún más cremoso y consistente.
Justo antes de servir, espolvorea una capa generosa de azúcar moreno o blanco sobre la superficie del arroz con leche, cubriéndola por completo. Quema el azúcar con un soplete de cocina hasta que se caramelice y forme una capa dorada y crujiente. Si no tienes soplete, puedes usar la función de grill de tu horno durante unos minutos, colocando la fuente cerca del calor y vigilando atentamente para que no se queme demasiado.
Para finalizar, espolvorea un poco de canela en polvo por encima del azúcar quemado. ¡Listo para disfrutar de este postre celestial que hará las delicias de todos!
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