Carrilleras de Cerdo Estofadas con Chocolate y Vino Tinto

¡Hola, amantes de la buena cocina! Hoy en Quick Recipe nos atrevemos con una de esas elaboraciones que, solo con escuchar su nombre, ya evocan una experiencia culinaria inolvidable. Nos sumergimos en la audaz y deliciosa fusión de sabores de unas Carrilleras de Cerdo Estofadas con Chocolate y Vino Tinto. ¿Chocolate con carne? Sí, y la combinación es una sinfonía de umami, dulzura sutil y una profundidad que transformará tu mesa en un festín gourmet.

Este plato es la definición de confort elevado. Las carrilleras de cerdo, conocidas por su melosidad inigualable tras horas de cocción lenta, se encuentran con la riqueza de un buen vino tinto y el toque sorprendente, pero armonioso, del chocolate negro. El resultado es una carne que se deshace en la boca, bañada en una salsa aterciopelada, brillante y compleja, que dejará a todos tus comensales pidiendo la receta. Ideal para una ocasión especial o simplemente para darte un capricho.

No te dejes intimidar por la lista de ingredientes o el tiempo de cocción. La mayor parte del trabajo la hará el tiempo a fuego lento, permitiéndote disfrutar de los aromas que impregnarán tu cocina. Prepárate para descubrir un clásico reinventado que se convertirá en uno de tus platos estrella. ¡Manos a la obra!

Ingredientes:

  • 1 kg de carrilleras de cerdo ibérico (o de buena calidad)
  • 2 cucharadas de harina de trigo
  • Sal y pimienta negra recién molida al gusto
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 1 cebolla grande, picada finamente
  • 2 zanahorias medianas, peladas y picadas
  • 2 dientes de ajo, picados
  • 1 puerro, solo la parte blanca, picado
  • 750 ml de vino tinto de buena calidad (Ribera del Duero, Rioja, etc.)
  • 500 ml de caldo de carne (o de pollo)
  • 2 hojas de laurel
  • 1 ramita de tomillo fresco
  • 50 g de chocolate negro (mínimo 70% cacao), picado
  • Perejil fresco picado para decorar (opcional)

Preparación:

1. Para empezar, limpia las carrilleras de cualquier exceso de grasa o telillas, sécalas bien con papel de cocina. Sazona generosamente con sal y pimienta, y luego enharínalas ligeramente, sacudiendo el exceso de harina. Esto ayudará a sellar la carne y a espesar la salsa.

2. En una olla grande de fondo grueso o cocotte apta para horno, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Dora las carrilleras por todos sus lados hasta que estén bien selladas y con un color dorado apetitoso. Retira la carne de la olla y resérvala.

3. Baja el fuego a medio. Añade la cebolla, las zanahorias, el ajo y el puerro picados a la olla. Sofríe las verduras durante unos 10-15 minutos, hasta que estén tiernas y ligeramente caramelizadas. Raspa el fondo de la olla para desprender los jugos y sabores que se hayan pegado.

4. Vierte el vino tinto sobre las verduras. Sube el fuego y deja que hierva vigorosamente durante unos 5-7 minutos, permitiendo que el alcohol se evapore y el vino reduzca un poco. Este paso es crucial para concentrar el sabor del vino en la salsa.

5. Vuelve a incorporar las carrilleras a la olla. Añade el caldo de carne, las hojas de laurel y el tomillo fresco. Asegúrate de que las carrilleras queden casi completamente cubiertas por el líquido. Lleva la mezcla a ebullición, luego reduce el fuego a lo mínimo, tapa la olla y cocina a fuego lento.

6. Cocina las carrilleras a fuego lento en la estufa durante aproximadamente 2.5 a 3 horas, o hasta que estén increíblemente tiernas y se deshagan fácilmente con un tenedor. También puedes cocinarlas en el horno precalentado a 160°C (325°F) durante el mismo tiempo. Remueve ocasionalmente y asegúrate de que el líquido no se seque demasiado; si es necesario, añade un poco más de caldo caliente.

7. Una vez que las carrilleras estén tiernas, retíralas de la olla y deséchales las hojas de laurel y el tomillo. Si deseas una salsa más fina, puedes pasar las verduras de la salsa por un pasapurés o triturarlas con una batidora de mano. Vuelve a llevar la salsa a fuego suave y añade el chocolate negro picado. Remueve constantemente hasta que el chocolate se derrita completamente y se integre en la salsa, aportándole brillo y una densidad sedosa.

8. Vuelve a introducir las carrilleras en la salsa y calienta suavemente durante unos minutos para que se impregnen bien de todos los sabores. Prueba y ajusta la sazón si es necesario. Sirve las carrilleras bien calientes, acompañadas de su exquisita salsa. Puedes decorar con un poco de perejil fresco picado para añadir un toque de color y frescura.

¡Y listo! Ya tienes un plato digno de los paladares más exigentes, perfecto para lucirte sin complicaciones excesivas. Si tienes alguna duda sobre la cocción, la mejor elección de vino, o incluso si necesitas adaptar esta receta para una dieta sin gluten o sin lácteos, no dudes en preguntar a nuestra Chef María en el chat de Quick Recipe. Además, recuerda que puedes usar la app para generar automáticamente la lista de la compra de esta receta, pedir menús semanales personalizados, consultar dietas específicas para alérgicos o incluso para adelgazar. ¡Estamos aquí para hacer tu vida culinaria más sencilla y deliciosa!